ENFERMEDAD INFLAMATORIA INTESTINAL
La enfermedad inflamatoria intestinal, es en realidad un conjunto de enfermedades que tienen en común la alteración de la pared del tubo digestivo, secundaria a un ataque autoinmune (o sea que las propias defensas del organismos desconocen a partes del tubo digestivo y se gatilla entonces un proceso inflamatorio en ellas).
Las dos entidades más reconocidas dentro de este grupo son la “colitis ulcerosa idiopática” y la “enfermedad de Crohn”, aunque en algunos pacientes comparten características en ambas enfermedades y se dice que tienen “colitis indeterminada”.
colitis ulcerosa idiopática
Se trata de un trastorno autoinmune, con base genética y ambiental no muy bien conocido, en el cual los mecanismos de defensa de nuestro organismo desconocen como propia a la mucosa del colon (o intestino grueso), produciendo una reacción inflamatoria, responsable de los síntomas. Se desconoce con certeza la causa de la enfermedad.
Afecta más a varones que a mujeres, y si bien puede diagnosticarse casi a cualquier edad, es más frecuente que se inicie entre los 20 y 30 años.
Generalmente el comienzo es súbito de días a semanas, y la mayoría de los pacientes tienen aumento de la frecuencia de las deposiciones (diarrea) con o sin sangre, y molestias abdominales. Puede presentarse con fiebre, malestar general, cefalea, pérdida de peso, y en casos más severos y más raros, con dolor abdominal intenso que requiere internación.
Algunos pacientes además pueden experimentar síntomas extra intestinales como artritis, lesiones en la piel, alteraciones del hígado u oculares, pero estas manifestaciones no son muy frecuentes.
Para el diagnóstico se debe realizar una videocolonoscopía con toma de biopsias y análisis por un médico patólogo. En la mayoría de los casos eso es suficiente para diagnosticar la enfermedad, pero ocasionalmente puede ser necesario la realización de estudios complementarios de imágenes y laboratorio.
El tratamiento siempre tiene que estar coordinado por un médico gastroenterólogo y consta de una serie de medicamentos, ya sea por vía oral, endovenosa o en supositorios, de acuerdo a la gravedad de la enfermedad.
Hasta la fecha, se considera que una vez controlado el ataque inicial, los pacientes van a requerir medicación de por vida para disminuir la frecuencia y la intensidad de nuevos ataques. Si bien la gran mayoría de los pacientes pueden controlar los síntomas con medicamentos, pocos casos más graves pueden llegar a requerir cirugía del colon.
enfermedad de Crohn
Es un trastorno menos frecuente que la colitis ulcerosa idiopática. En esta enfermedad se puede afectar cualquier parte del tubo digestivo, desde la boca hasta el ano, y el ataque autoinmune es más profundo, afectando no solo la mucosa digestivo, sino las capas más profundas.
Esto da como resultado que las manifestaciones clínicas sean muy variables, desde molestias abdominales inespecíficas, diarrea con o sin sangre, distensión abdominal, hasta pérdida de peso, perforación intestinal (situación que genera una emergencia médica), obstrucción intestinal y fístulas perianales. Esta variabilidad clínica ocasiona que eventualmente el diagnóstico sea muy difícil y requiera la participación de grupos multidisciplinarios de profesionales de la salud. Además, las manifestaciones extra intestinales como lesiones en la piel, los ojos, las articulaciones y el hígado, son frecuentes en estos pacientes.
El tratamiento se basa en medicamentos que disminuyan la capacidad de los mecanismos de defensa del organismo como los corticoides o los inmunosupresores, y la elección del mejor medicamento se basa en la gravedad y localización de la inflamación.
Es una patología para manejo de Médico Gastroenterologo teniendo gran importancia la relación médico paciente. En ocasiones puede ser necesario tratamiento quirúrgico de algunas lesiones intestinales.
RECOMENDACIÓN
Ante la aparición de los síntomas mencionados NO SE AUTOMEDIQUE. Consulte a su médico que lo sabrá orientar con los pasos a seguir.
Fuente CED